x Catu Assennato

La gran aventura dentro de nuestra aventura en el fin del mundo fue ir a la montaña. Para algunas integrantes del equipo una de sus actividades favoritas en el planeta, mientras que para otras (como yo) algo completamente nuevo y desafiante… pero sin dudas entusiasmante.  

En Unplastify nos gusta hablar de desafíos, ya que los procesos de desplastificacion implican cambiar la cultura y  eso no suele ser nada fácil. Es más pueden resultar hasta muy desafiantes. Por eso esta palabra. Un desafío por definición es una “situación difícil con la que alguien se enfrenta”. Creo que es algo que ocurre todos los días. Ya sea al intentar algo nuevo, viajar a un lugar desconocido o dar el primer paso en un nuevo proyecto. 

Durante nuestro viaje de exploración en Ushuaia hicimos un trekking de 2 días. Caminamos hasta la Laguna del Caminante, donde pasamos la noche, y al día siguiente continuamos hacia el Cañadón de la Oveja, un lugar increíble. Era como estar en Marte. Fueron 25 km, y 2 días llenos de anécdotas e imágenes inolvidables.

Embarcarnos en una aventura por la montaña fue enfrentarnos a otro tipo de desafío como equipo. Implicó salir completamente de nuestra zona de confort. Trabajar en conjunto pero ya no frente a nuestras computadoras en un cowork, si no en medio de la nada. Integrantes del equipo con vértigo, frío y en mi caso una zapatilla que se iba rompiendo a medida que caminaba. Fue todo un desafío que creo que ninguna va a olvidar. Dicen que la vida es cuesta arriba pero que la vista es genial. Indiscutiblemente lo es, a pesar de todas las adversidades o inconvenientes que podrían haber surgido en el camino llegamos a lugares increíbles. Y como en toda expedición en la montaña el trabajo en equipo fue muy importante. Desde armar una carpa y cocinar, hasta llegar al final del recorrido.

En esos dos días en plena naturaleza re descubrimos la importancia de la colaboración, el apoyo moral y la compañía cuando el objetivo es el mismo. El proceso nunca es igual. Pero el trabajo en equipo siempre es CLAVE, en una expedición en la montaña y en un proyecto para desplastificar una empresa. 

La montaña deja muchas enseñanzas. Pero creo que en mi caso, la más destacable es decir SI a los desafíos. Si a subir una montaña, si a hacer algo completamente nuevo y sin dudas SI a desplastificar el mundo. ¿Por qué no encarar retos que asusten o parezcan imposibles? Alguna vez me dijeron que lo imposible sólo lleva un poco más de tiempo…. Elijo quedarme con eso. Subir una montaña y desplastificar el mundo serán 2 cosas completamente diferentes, pero no dejan de ser un gran desafío para quién decida intentarlo y no me caben dudas de que no serían posibles sin un gran equipo.

¿Te animas a decirle que sí a lo imposible?